La madre de Demi Lovato, Dianna De La Garza, habló por primera vez sobre la sobredosis que dejó a la cantante pop de 26 años luchando por su vida en julio pasado.
La Garza contó que se enteró del grave estado de salud de su hija a través de una llamada telefónica de la entonces asistente de Lovato, Kelsey Kershner. "Ella dijo, 'Demi sobredosis'", recordó De La Garza en una entrevista con NewsMax TV el martes.
"Yo estaba en shock. No sabía qué decir. Fue algo que nunca esperé escuchar como padre, sobre ninguno de mis hijos. Y dudé en preguntar, pero tuve que preguntarle: recuerdo que me pareció que las palabras tardaron una eternidad en salir de mi boca. Le dije: '¿Está bien?'"
De La Garza continuó, "[Kershner] se detuvo por un segundo y dijo: 'Está consciente, pero no está hablando.' Y entonces supe que estábamos en problemas".
La conmoción la hizo incapaz de manejar hacia el hospital, así que De La Garza llamó a su hija mayor Dallas para que la llevara al Centro Médico Cedars-Sinai en Los Ángeles.
"Llegamos tan rápido como pudimos. Saltamos del auto y corrimos a la sala de emergencias para estar a su lado y simplemente no se veía bien, pero le dije: 'Demi, estoy aquí; Te amo'. Y en ese momento ella dijo:' Yo también te amo'. Entonces, a partir de ese momento, nunca me permití pensar que las cosas no estarían bien", detalló.
La ex estrella infantil ha tenido problemas con la adicción, las enfermedades mentales y la alimentación desordenada durante años. En marzo había celebrado seis años de sobriedad, pero solo tres meses después, confesó públicamente que había sufrido una recaída a través del sencillo "Sober" el 21 de junio.
Infobae
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